Revendedores de Roscas se defienden: "cobramos el tiempo y esfuerzo"
Este año las famosas roscas del Costco han dado mucho de qué hablar.
La tradición del Día de Reyes en 2025 nuevamente se ha visto afectada por una situación recurrente: la reventa de roscas de las conocidas tiendas de venta al por mayor.
Durante la madrugada del 4 de enero, largas filas se formaron a las afueras del establecimiento de una de estas cadenas en Hermosillo, con numerosos revendedores acaparando este postre para luego venderlas a precios más elevados.
Esta práctica ha generado controversia y debate entre los consumidores y comerciantes, ya que muchos consideran que inflar los precios de las roscas es injusto y perjudica a quienes desean adquirirlas a un costo razonable.
A través de diversas imágenes compartidas, se vieron las extensas filas que rodeaban a Costco, donde los usuarios de redes sociales arremetieron contra las personas que se encontraban en el sitio, pues en su mayoría eran revendedores.
Ante esto, existe el cuestionamiento de algunos internautas sobre las razones que orillan a los prestadores de estos servicios a inflar los precios de una manera que consideran "excesiva" para las roscas de Reyes.
Defienden su labor
Una revendedora de Costco, en entrevista para e Media, habló sobre las fuertes críticas que recibe en estas fechas del año, compartiendo que, para poder adquirirlas, hace fila durante 6 horas para ser una de las primeras.
“Hago fila desde las 4 de la mañana para ser una de las primeras 3 o 4 personas, porque si eres la número 20 de la fila probablemente no alcances”, señaló.
La vendedora indicó que asiste al sitio todos los días, ya que ella revende todo lo relacionado a panadería de Costco, tienda que abre a las 10:00 horas; además, comentó que diariamente se lleva entre 80 a 100 productos para revender.
En este caso, por la fecha y la demanda que existe, la hermosillense compró un aproximado de 70 roscas, mismas que vende a 650 y 700 pesos cada una, dependiendo si se trata de la tradicional o la rellena. En cuanto al precio, ella señaló que no solo vende la rosca, sino también su tiempo, esfuerzo y gasolina, y que los malos comentarios no le preocupan o perjudican.
“Yo considero que estoy cobrando mi tiempo, mi desvelo, esfuerzo y gasolina (…) Mucha gente se enoja, pero a mí no me afecta, ni me ofende (…) No me perjudica, al contrario, espero que la persona me conozca, el servicio y la calidad”, comentó.
El que se enoja pierde
La revendedora, quien ofrece sus servicios por una página de Facebook y en Marketplace, en estas fechas se enfrenta a duros comentarios en esta red social, pues compartió que inclusive en una ocasión le reportaron su cuenta por vender.
“Mi teléfono me notificó que alguien intentaba entrar a mi cuenta y me tumbaron mi cuenta de Marketplace”, relató.
Ante esto, externó haber sentido "frustración y coraje" pero que no le desea el mal a nadie y que le da mucho gusto que la gente apoye este tipo de reventa y a las personas que se dedican a lo mismo.
“No es malo el revender (…) El ‘hate’ de la gente lo utilizo como un impulso y una motivación en general”, finalizó.