Buena salud o la muerte: ¿Qué pasa si bebes agua de mar todos los días?
A pesar de que existe una comunidad en internet que defiende el consumir agua de mar para mejorar la salud, la realidad es totalmente distinta, pues los expertos explican todos los daños que puede ocasionar esta práctica al cuerpo humano.
A pesar de las afirmaciones de algunos defensores, beber agua de mar cada mañana puede tener consecuencias graves para el cuerpo humano, según advierten expertos en salud.
En redes sociales existen personas que afirman que existen beneficios de beber agua de mar, los riesgos radican en la salinidad del agua salada y sus efectos perjudiciales en el organismo.
Riesgos al cuerpo humano
La salinidad permitida en el cuerpo humano se sitúa alrededor de 9, reflejando la cantidad de sal presente en nuestros fluidos, considerados isotónicos por tener una concentración de solutos similar a la sangre humana. En contraste, el agua de mar es hipertónica, con una salinidad promedio de 35. Esta diferencia desencadena el proceso de ósmosis, donde el agua fluye hacia afuera de las células.
Al beber agua de mar, este proceso se convierte en un desastre para el cuerpo. Aunque la sal es esencial en pequeñas cantidades, debe ir acompañada de agua potable para ser beneficiosa. Beber agua de mar se convierte así en un experimento arriesgado que puede tener consecuencias mortales para la salud.
Además, el agua de mar no está tratada y puede contener microorganismos perjudiciales. A diferencia del agua que consumimos normalmente, que pasa por procesos de purificación, el agua de mar presenta riesgos de contaminación que podrían afectar la salud del organismo.
Problemas cardíacos y la muerte
El consumo de agua de mar puede llevar a una deshidratación significativa, ya que las células del cuerpo expulsan agua para compensar el exceso de sal. Esto, a su vez, puede provocar una elevación peligrosa de la tensión arterial, aumentando el riesgo de problemas cardíacos.
Los efectos adversos de beber agua de mar no se limitan a la deshidratación y la presión arterial elevada. También pueden incluir náuseas, debilidad y, en casos extremos, delirios. Si no se trata a tiempo, el cuerpo puede empezar a fallar, impidiendo que la sangre llegue adecuadamente al cerebro, lo que podría desembocar en un coma y, en última instancia, en la muerte.
Ante estos riesgos, los expertos enfatizan la importancia de comprender los peligros asociados con la ingesta de agua de mar y aconsejan evitarla a toda costa para preservar la salud del cuerpo humano.
CON INFORMACIÓN DE EL UNIVERSAL
