Islandia en estado de alerta; anticipan erupción volcánica a la brevedad
La Oficina Meteorológica de Islandia informó que la decisión de evacuar Grindavik se tomó después de que la actividad sísmica se desplazara hacia la ciudad y los monitoreos indicaran que un corredor de magma ahora se extiende debajo de la comunidad de 3 mil 400 habitantes.
Las autoridades islandesas han declarado el estado de emergencia en la región suroeste del país después de que la actividad sísmica y la detección de un corredor de magma subterráneo generaran preocupaciones sobre una posible erupción volcánica.
Según reportan agencias internacionales como AP, los residentes del pueblo pesquero de Grindavik, ubicado en la península de Reykjanes, han sido evacuados, marcando un momento de tensión en la nación islandesa.
La Oficina Meteorológica de Islandia informó que la decisión de evacuar Grindavik se tomó después de que la actividad sísmica se desplazara hacia la ciudad y los monitoreos indicaran que un corredor de magma ahora se extiende debajo de la comunidad de 3 mil 400 habitantes. A pesar de la incertidumbre sobre si el magma alcanzará la superficie, las autoridades han tomado medidas preventivas para garantizar la seguridad de los residentes.
"En esta etapa, no es posible determinar exactamente si el magma podría llegar a la superficie y dónde", comunicó la Oficina Meteorológica, subrayando la complejidad de prever con precisión el desarrollo de eventos volcánicos.
La alerta de aviación se ha elevado a naranja, señalando un mayor riesgo de erupción volcánica. Las erupciones representan un peligro significativo para la aviación debido a la posibilidad de arrojar cenizas a la atmósfera, lo que podría afectar los vuelos y la seguridad aérea.
No es la primera vez
Esta situación revive el recuerdo de la erupción en Islandia en 2010, que provocó caos en los viajes aéreos entre Europa y América del Norte. La cancelación de más de 100 mil vuelos y pérdidas estimadas de 3 mil millones de dólares para las aerolíneas resalta la gravedad de las consecuencias económicas y logísticas que pueden surgir de eventos volcánicos.
La región ha experimentado una actividad sísmica constante durante más de dos semanas, con cientos de pequeños terremotos diarios. La acumulación de magma a unos 5 kilómetros bajo tierra ha sido objeto de monitoreo científico, y la preocupación aumentó tras un sismo de magnitud 4.8 que afectó la zona en las primeras horas del jueves pasado.
El complejo geotérmico Blue Lagoon, un atractivo turístico internacionalmente conocido, también se vio afectado, cerrando temporalmente debido a la actividad sísmica.