Donald Trump pone en pausa proceso de Green Cards

La administración de Donald Trump ha detenido el procesamiento de algunas Green Cards para refugiados y asilados, argumentando la necesidad de realizar evaluaciones adicionales por razones de seguridad nacional.

La administración del presidente Donald Trump ha pausado el procesamiento de ciertas solicitudes de Green Card presentadas por inmigrantes que cuentan con el estatus de refugiados o asilados en Estados Unidos, argumentando la necesidad de realizar un mayor escrutinio en materia de seguridad nacional.

La Green Card es el documento que otorga la residencia permanente legal en el país, permitiendo a su titular trabajar y vivir en Estados Unidos de manera documentada durante un período de hasta 10 años. Sin embargo, la decisión de detener el procesamiento podría dejar en un limbo legal a aquellos inmigrantes que ya habían demostrado ser víctimas de persecución en sus países de origen.

Según reportes de CBS News, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) ordenó a sus funcionarios suspender temporalmente la finalización de ciertas solicitudes de ajuste de estatus para realizar evaluaciones adicionales.

Un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) explicó que la medida responde a la necesidad de identificar posibles fraudes o amenazas a la seguridad pública y nacional.

"Se está poniendo una pausa temporal en la finalización de ciertas solicitudes de Ajuste de Estatus hasta que se completen evaluaciones y verificaciones adicionales", indicó el portavoz a CBS News.

La medida está en línea con la orden ejecutiva firmada por Trump el pasado 20 de enero, titulada "Protección de los Estados Unidos contra terroristas extranjeros y otras amenazas a la seguridad nacional y pública". El documento instruye a las agencias federales a investigar exhaustivamente a todos los extranjeros que busquen ingresar o permanecer en el país, especialmente aquellos provenientes de regiones consideradas de alto riesgo de seguridad.

Como parte de estas nuevas disposiciones, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) también ha comenzado a solicitar información de redes sociales como parte de las solicitudes de inmigración. El 5 de marzo de 2025, el DHS publicó un aviso en el Registro Federal que especifica los planes para recopilar identificadores de redes sociales en nueve formularios de inmigración.

El anuncio ha generado preocupación entre organizaciones de derechos civiles y activistas en defensa de los refugiados, ya que muchas personas que ya han sido admitidas como refugiadas en Estados Unidos ahora enfrentan incertidumbre legal mientras esperan la resolución de sus casos.

"Esta pausa administrativa podría dejar a miles de refugiados vulnerables en un limbo legal, a pesar de que ya han demostrado que su vida estaba en peligro en sus países de origen", señalaron representantes de organizaciones humanitarias.