¿Afecta muro fronterizo a la fauna sonorense? Preparan estudio de monitoreo
El estudio se llevará a cabo en el Valle de San Bernardino, ubicado al este de Agua Prieta.
Organizaciones dedicadas a la conservación del medio ambiente en Sonora, participan con Sky Land Alliance en un proyecto para analizar el impacto que tiene el muro fronterizo en Estados Unidos en la movilidad de la fauna en regiones de la entidad.
El Coordinador de Vinculación del grupo “Caminantes del Desierto”, Sergio Muller, indicó que este proyecto ya en operación, consiste en la instalación y monitoreo con "cámaras trampa".
“Se trata de una cámara camuflada que se coloca en algún árbol u otro sitio que tenga buena vista a la fauna que va pasando, y se activa con el movimiento para tomar fotografías o videos, después se revisan para ver qué es lo que sucede”, detalló.
Explicó que el estudio se estará llevando a cabo en la zona del Valle de San Bernardino, ubicado al este de Agua Prieta, justo entre el municipio sonorense y el pueblo de Janos, Chihuahua.
“Se trata de un corredor biológico que corre por la zona de las rocallosas, por el estado de Chihuahua, por el oeste del estado de Sonora, por el sur llega a la selva baja, entonces es una zona muy diversa biológicamente, donde el gobierno del estado tiene una reserva natural que se llama Rancho San Bernardino”.
Explicó que a partir de la construcción del muro de Donald Trump en el año 2020, el cual tiene una altura de 10 metros de alto, abarcando dos tercios de la frontera de Sonora con Arizona, se han percibido afectaciones a la fauna regional.
“Esto ha creado ya un problema de que no puede ya cruzar libremente la fauna de un lado a otro de la frontera, el gobierno mexicano reconoció la amenaza que representa el muro para el movimiento de la fauna y el impacto a las condiciones de la región”, dijo Muller.
Una vez concluido el estudio se habrán de integrar las conclusiones, las cuales deberán hacer llegar a las autoridades tanto mexicanas como de los estadounidenses, a fin de tomar las acciones necesarias para facilitar las condiciones de movilidad de la fauna entre ambas naciones.
“Empezó en junio el monitoreo, ya está empezando a haber registros, pero la elaboración del programa va a ser tres años, para tener datos concretos, de hecho en el primer mes ya se registraron más de 20 especies, entre lo que ha intentado cruzar hay registros de pumas y linces”.