Condusef advierte sobre los peligros de las apps de préstamo de dinero
La representante de Condusef en Sonora explicó que extorsionan al deudor para que pague más de lo acordado.
Las aplicaciones de préstamos de dinero se han convertido en uno de los métodos más modernos en su entorno, ya que desde tu propio celular puedes solicitar un crédito al momento de descargar una de estas apps, pero este asunto ha causado conflicto a los usuarios que hacen uso de estas plataforma debido a la manera en que te solicitan el pago, la cual dicen que en algunas ocasiones es de manera agresiva.
En el noticiero de Expreso 24/7, edición matutina, en entrevista con el periodista Marcelo Beyliss, la representante de la Condusef en Sonora, Blanca Alicia Rosas López, informó que esta clase de créditos que se ofrecen no se encuentran regulados por las autoridades, esto debido a que no se hacen los procesos en regla para que puedan estar avalados por la Profeco.
Estos créditos son de palabras, no hay ningún documento escrito, no hay condiciones, no tienen que firmar nada. Estos créditos se están ofreciendo en redes sociales, sobre todo en Whatsapp y aplicaciones móviles
Blanca Rosas
Rosas López comentó que este tipo de empresas que se dedican a los créditos bajo este medio ofrecen sus servicios con mucha facilidad, la mayoría de las veces los préstamos los depositan en cuestión de horas, pero lo complicado llega en la fecha de pago.
Acosan a contactos de WhatsApp
Estas aplicaciones pueden llegar a tus contactos, pues cuando se descarga y al momento de hacer tu solicitud para convertirse en un usuario, te solicitan permiso para poder acceder a tus contactos, contenido de tu celular, a tu cámara, entre otras cosas, y de esta forma hostigan a los conocidos del deudor.
“Piden pequeñas cuotas con intereses altos, la cuestión es que cuando empiezan a retrasarse en los pagos de esos créditos que resultan muy caros empiezan a atacar a las personas, no solamente al deudor, sino a todos los contactos que tengan sus redes sociales y Whatsapp”, declaró.