"Tenemos miedo": piden consulta sobre planta de licuefacción de gas
Incertidumbre y hasta temor hay en la comunidad Seri y Pápago de Puerto Libertad ante el silencio de las autoridades que han sido omisas en informar sobre los riesgos de construir una planta de licuefacción de gas en la región.
Raymundo Gaxiola, abogado agrarista y activista de la región, demandó que antes de concretar el proyecto industrial, los habitantes de la zona deben ser consultados para que den o no su anuencia a la mega obra energética.
"Estamos muy preocupados, porque sí se habla de que habrá inversiones de miles de millones de dólares, miles de empleos, con eso pretenden que pase desapercibido el gran riesgo y daño, no sólo para el medio ambiente, sino también para la comunidad, ahí hay pápagos, hay seris, pescadores, una gran variedad de ecosistema, muy amplio", comentó en entrevista con Marcelo Beyliss en el programa de Expreso 24/7, edición matutina.
El proyecto que causa la suspicacia entre los liberteños contempla una inversión de 10 mil millones de dólares y la generación de 24 mil empleos por parte de la empresa estadounidense Mexico Pacific, que recibirá gas natural proveniente de Estados Unidos para licuar y mandar a Asia.
"Estamos nerviosos porque no sabemos, nadie nos ha informado, nos enteramos en junio por la prensa y por el Presidente, sin embargo a los habitantes jamás se les ha informado o se les ha tomado en consideración si estamos de acuerdo o no de que se haga ese proyecto. Queremos que se nos informe y dar el sí o no, pues es un derecho humano", apuntó el representante de la Asociación Defensa Social Campesina de Puerto Libertad.
Explicó que el riesgo de la obra es que, con la construcción de un puerto, va a invadir la flora y fauna del Mar de Cortés, que es la fuente de empleo y de vida de la etnia Seri.
"Pretenden traer buques tanques, se van a manejar 12 millones de litros de gas natural ahí. Creemos que podría ser una bomba de tiempo, además del peligro de derrames, de la planta y de los buques tanques, lo que afectaría a la flora y fauna, principalmente al borrego cimarrón, con un daño irreparable a la comunidad", advirtió el activista social.
"Tenemos información de que ha habido explosiones en otros lugares, tenemos derechos como ciudadanos a que se nos informe sobre el proyecto y sus riesgos, para poder decir si queremos que se haga o no. A lo mejor todo está bien, pero no sabemos porque no se nos ha informado", argumentó.
Los quejosos han tenido acercamiento con la empresa, que ha ignorado la solicitud de información, por lo que el siguiente paso es acercarse a las autoridades y ante organismos internacionales, pues consideran que pueden ser más los riesgos que los beneficios.
"El problema es a qué costo se va a generar la derrama económica de la región que es un lugar pacífico y que sus moradores viven de la pesca", indicó.
Señaló que más que incertidumbre, es temor, ante el silencio de la empresa y de las autoridades que han sido omisas en atender a los ciudadanos, incluso del Presidente que no consultó a la gente de la región como sí lo hizo en otros proyectos.