Subsidio a las gasolinas está desangrando las finanzas en México, alerta economista

HERMOSILLO, SON.- Mientras más tiempo continúe la guerra entre Rusia y Ucrania más dificultades habrá para el mundo de los energéticos y para México en particular dependiendo de cómo se resuelva el conflicto o si Estados Unidos participa o no, de ahí derivará lo que puede suceder con el precio del petróleo y con ello de las gasolinas, señaló Luis Núñez Noriega.

El economista, académico e investigador indicó que actualmente la política interna del gobierno de México es de cumplir el compromiso de no subir el precio de la gasolina y como esta cuesta más cara lo que hacen es subsidiarla a través del Impuesto Especial Sobre Precios y Servicios (IEPS)

“México está adquiriendo gasolina más cara, sin embargo, en la política interna del gobierno de nuestro país ante los consumidores hay un compromiso de no subir el precio de la gasolina y como la gasolina ya está costando más cara y el gobierno no quiere subir el precio lo que está haciendo es subsidiar el IEPS, esto es para cumplir la promesa de no subir los precios.

“Ese impuesto es más o menos de 5.50 pesos por cada litro de gasolina regular, de 4.60 por cada litro de gasolina premium y de 6 pesos por cada litro de diesel, eso es lo que está pagando ahorita de subsidio el gobierno federal por cada litro que se vende de combustible en México”, apuntó.

Impuesto alto

El especialista en economía subrayó que ese subsidio de alrededor de cinco pesos por cada litro de combustible se paga con recursos de impuestos de todos los mexicanos que a través de la Secretaría de Hacienda están cubriéndolos.

“Es un impuesto muy alto que está desangrando poco a poco las finanzas públicas del gobierno federal, no es que el gobierno lo esté pagando, el gobierno está transfiriendo recursos de los impuestos para cubrir ese subsidio, sí nos está costando a todos los mexicanos que pagamos impuestos estamos pagando ese subsidio para mantener el precio lo más bajo posible”, dijo.

Núñez Noriega explicó que México es un buen productor de petróleo crudo y así lo exporta a bajo precio para después importar gasolina que no es más que ese petróleo ya refinado en Estados Unidos y otros lugares donde sí hay capacidad de refinación.

“Vendemos un producto muy barato que es materia prima y compramos un producto de alto valor como lo es la gasolina ya refinada, eso quiere decir que vendemos productos baratos y compramos el mismo producto refinado pero muy caro.

“Con la guerra de Rusia y Ucrania como son productores de energéticos ambos países de combustibles, petróleo y gas, lo que sucedió es que ante la posibilidad de que el conflicto estalle se empezaron a presionar los mercados y empezaron a subir el precio del petróleo, si sigue el conflicto bélico va a estar subiendo y no sabemos hasta dónde llegue, es muy difícil pronosticarlo, depende de muchos factores”, puntualizó.