Temo por mi seguridad y la de mi familia: ex funcionaria de Navojoa

NAVOJOA, SON. - La semana pasada en la Perla del Mayo, se corrió el fuerte rumor de la renuncia de Alejandra Aceves Barreras a su cargo como Secretaria de Programación del Gasto Público, siendo la quinta funcionaria de la administración pública municipal de Navojoa 2021-2024 que se separa de su cargo.

El un comunicado el cual, fue compartido a través de redes sociales, detalló que su separación del cargo fue por temer por su seguridad y la de su familia, además de los conflictos con el líder del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del H. Ayuntamiento de Navojoa, Ramón René García Vallejo.

Comunicado

(Trascripción del documento original)

Orgullosa de mi origen en una familia trabajadora fui siempre formada, hoy lo digo con mucha satisfacción, bajo principios y valores fuertes y claros; soy la hija de un dentista trabajador jubilado del IMSS, soy la hija de una contadora hasta su retiro; fui estudiante de los mejores colegios siempre con becas y créditos educativos pagados hasta años después de graduarme. Soy una persona que nace y es educada en la cultura del trabajo honesto y productivo.

Yo soy de las personas que disfruto mi trabajo, me gusta trabajar y lo hago siempre comprometida con lo que creo y sé que es correcto y justo.

El destino me puso en el camino de nuestro Presidente Municipal Mario Martínez hace más de 2 años. Sin conocerlo con anterioridad, creí en su proyecto y tomé la decisión de sumarme al 100, a él le agradezco su apoyo y su confianza al invitarme a participar como Secretaría de Programación del Gasto Público (SPGP), tarea que desempeñé convencida de la responsabilidad que implica servir a mi comunidad y del honor que representa acompañar a la primera autoridad en este camino de esfuerzo por el bienestar de todos los navojoenses.

En los últimos días se han dicho un sinfín de cosas inexactas, y carentes de verdad sobre mi persona y sobre el trabajo realizado en este corto tiempo como SPGP. Entendí, como así se me explicó, que la estrategia de comunicación social de nuestro Municipio era otra, lo que no me permitió salir antes a hacer las debidas precisiones y desmentidos a todos y cada uno de los comentarios que con desconocimiento de causa y de mala fe se hicieron sobre mi persona y la labor que venía desempeñando en la administración pública municipal.

Si partimos de la premisa que como servidores públicos tenemos la responsabilidad de manejar con estricto apego a la transparencia y en absoluta observancia de los principios de la disciplina financiera todos los recursos de los ciudadanos, no será difícil entender por qué gran parte de nuestro trabajo generó tanta incomodidad y molestia de propios y extraños, había que poner orden en las finanzas y para ello fue indispensable —desde el principio– establecer duros y estrictos criterios de revisión para la programación y autorización de los gastos, como tarea inherente a nuestra responsabilidad, en todas las áreas de la estructura municipal; lo anterior con la consecuente molestia sobre todo de aquellos que por mucho tiempo han estado acostumbrados a que los manejos de los recursos, que son de todos, pasen por alto cierta normativa que una servidora consideró desde el principio fundamental por una cuestión de ética, de congruencia y sobre todo de legalidad.

El quehacer de la Secretaría de Programación del Gasto Público tiene y debe tener injerencia directa en todas las áreas de la administración pública municipal, en tanto que en todas y cada una se realizan actividades que tienen que ver con el gasto y manejo de los recursos que son de todos. Esta fue entonces una decisión que obedeció a criterios del ámbito de las funciones del puesto, y NO, y nunca NO, una cuestión relacionada a un capricho o una visión personal, como así quisieron hacerlo creer a quienes nunca les convino esta forma de trabajar de cara a la comunidad.

¿Qué molesté al líder Sindical? Sí, sí lo molesté y era normal que se molestara por los cambios que se fueron llevando a cabo desde mi Secretaría:

En el tema particular del Fondo de Ahorro. Al inicio de la administración me di cuenta que los fondos de ahorro eran depositados a la cuenta de una persona física. Al leer los contratos y reglamento relacionados con este tema, me di cuenta que se debía depositar a una cuenta del sindicato y no de una persona física. Me asesoré en las diferentes dependencias municipales y estatales sobre el caso y en resumidas cuentas la respuesta fue: Si firmas esa solicitud puede llegar a ser cárcel ya que se presume como desvío de recursos. ¿Ustedes firmarían? Yo no. ¿Qué nunca había pasado antes nada? Tal vez. Esta información fue dada a las personas correspondientes en tiempo y forma. Tal es el caso, que uno de los 2 sindicatos que tiene nuestro Municipio abrió su cuenta bancaria a nombre del sindicato y sin mayor problema se le depositaron los recursos. ¿Esto molestó al líder? Claro que sí.

El pago del salario mínimo garantizado a los trabajadores sindicalizados con diversos descuentos, la detección de aviadores, la reubicación de personal sindicalizado a lugares donde consideramos que pudieran ser más productivos; fueron entre otros temas que molestaron al líder sindical.

Los trabajadores sindicalizados en su gran mayoría son personas muy trabajadoras, responsables, éticas y profesionales, que se merecen todos los logros sindicales que tienen y que han dedicado muchísimos años al servicio de los ciudadanos.

¿Qué me metía en todas las dependencias? Claro que sí, de la SPGP dependen las áreas de Recursos Humanos, Sistemas, Planeación, Presupuesto, Compras. Por la propia naturaleza del ámbito de sus funciones, no sólo debe tener injerencia en todas las áreas. Se intentó implementar un control y un orden que al momento de entrar no existía. ¿Para qué? Para llevar un mejor control interno de dónde y cómo se gastan los recursos que son de todos.

El trabajo realizado por la SPGP es un trabajo y una dependencia muy técnica, mi trabajo todo el tiempo fue un trabajo técnico, procurando tener y seguir al pie de la letra los manuales de procedimiento de la Secretaría.

Lamento que hoy quienes señalan y juzgan en lo público mi desempeño, jamás se hayan acercado a dialogar, a exponer sus dudas y a conocer las razones y las condiciones que hoy asumen de forma global —y por cierto– incorrectamente inadecuadas. Todo lo que se hizo se hizo dentro de lo que marca la normativa, nada fuera de la ley, nada por encima de la ley.

Estoy orgullosa del trabajo realizado en este corto tiempo. Tomé la decisión de salir por cuidar mi seguridad y la de mi familia, pero sé que vienen cosas muy buenas para Navojoa.

Me reitero siempre a la orden.

Tomado de redes.