Rodney Ingram, el mexicano que triunfó en Broadway y vuelva para traernos 'Aladdín'

"Si ven un poco subido de peso a Aladdín es por culpa de la comida mexicana", bromea el actor Rodney Ingram, quien después de 14 años ha vuelto a México para construir el montaje de "Aladdín", el musical, y confiesa que se ha vuelto un turista de su propio país, especialmente de la comida.

El joven de 30 años nació y vivió en Sayulita, Nayarit hasta los 16, edad en la que se dio cuenta que quería apostar por el canto, por el baile, por el teatro e irse a Estados Unidos (de donde es su padre). Esta es la primera vez que vuelve a México desde entonces, tras haber actuado en Broadway y, sobre todo, como protagonista de una de sus historias favoritas.