¿Comedor compulsivo?

Dentro de las adicciones más aceptadas y menos reconocidas como tal, se encuentra la comida. Insisto de nueva cuenta, las adicciones no es solo la drogadicción; todo lo que hagamos de forma compulsiva que afecte mi entorno personal, familiar, laboral, social; se puede catalogar como una adicción.

En este mes me gusta tocar los temas relacionados a la comida, a las dietas, a las pastillas milagrosas para adelgazar, los remedios milagrosos, etc. Todo relacionado a los trastornos alimenticios.

Porque comer de forma compulsiva se trata de igual forma que una adicción; cuando yo doy información a la familia sobre nuestro modelo de trabajo, siempre les digo que la adicción es la cereza del pastel, pero ese pastel está conformado por un cúmulo de traumas, de depresiones no identificadas, trastornos mal tratados. Es por ello que nuestra forma de trabajar es de manera integral, en esta situación no hay que romantizar la obesidad, así como la delgadez extrema considerarla como algo “bonito”, pero en esta ocasión estamos hablando de la obesidad.

En la actualidad está la famosa operación de la manga gástrica que considero en mi humilde opinión una buena opción cuando hay enfermedades crónico degenerativas; pero tenemos que ver que también debemos de acompañarla de una sanidad emocional, ya que no debemos dejar de lado que somos seres humanos, compuestos por cuerpo, mente y espíritu.

No les ha pasado que desean cambiar hábitos alimenticios y de vida, y empezamos muy emocionados, y duramos solo dos semanas, ¿nos damos por vencidos?, eso ocurre mucho en enero que se llenan los gimnasios y luego va disminuyendo; aquí debemos de identificar que hacemos por una emoción o por convicción. No debemos dejar de lado que es un proceso, si tú estás con la intención de hacer un cambio real, recuperar tu autoestima, tu seguridad, tu salud, primero debes de tener la convicción de hacerlo. Que los motivos sean profundos no superficiales. Después, ponerte metas reales en plazos reales, queremos 10 kilogramos en un mes (amalaya) pero no, debemos ser realistas, dejar de lado lo “milagroso”, lo rápido. Todos, todos sabemos que la única

forma de bajar de peso y tener un cuerpo saludable es, alimentación saludable, balanceada y ejercicio. No Hay otra opción.

Por otro lado debemos de sanarnos emocionalmente, aceptarnos, perdonarnos, y perdonar; identificar esos vacíos y llenarlos con lo que realmente vale, no con personas, no con alimentos, no con sentimientos. Considerar valoración psiquiátrica para descartar una depresión no tratada.

Si deseas tener un programa más completo de rehabilitación, acércate a profesionales, descarta en un 100% pastillas y suplementos milagrosos, un proceso integral te ayudara a considerar tus metas a largo plazo pero fijas y sin retrocesos.