Lucrar con la salud en época de coronavirus

La pandemia que trajo consigo el Covid-19 no sólo ha puesto de cabeza al mundo, sino que también ha sacado el lado mezquino de algunas personas que aprovechándose de la situación, se abastecen de ciertos medicamentos para después revenderlos.

Hace unos días escuché el testimonio de una joven que junto a varios integrantes de su familia está infectada de SARS-CoV-2, diagnóstico que la ha hecho ver su suerte y no me refiero sólo a la preocupación que le causa tener coronavirus, sino al calvario que ha enfrentado al tener que conseguir los medicamentos por su cuenta, ya que no es derechohabiente a alguna institución de seguridad social.

Hecho que evidentemente vino a mermar la economía de su familia, pues seis de los siete integrantes salieron positivos al Covid-19, y al no tener trabajo o estar en aislamiento, realmente la están pasando mal, pero por si fuera poco, al buscar ivermectina, uno de los medicamentos que supuestamente ayuda a combatir la enfermedad, se han topado con que el costo está por las “nubes”.

Resulta y resalta que un medicamento que normalmente no pasaba de los 70 u 80 pesos, ahora por su alta demanda lo encuentras en los establecimientos farmacéuticos en un precio por encima de los 200 pesos.

Pero la cosa no para ahí, pues precisamente por su alta demanda, ahora hay desabasto de este antiparasitario que hasta hace unos meses era utilizado para combatir los piojos y que ahora es buscado desesperadamente para usarlo contra el Covid-19.

Sí, ahora este medicamento es revendido a través de las redes sociales porque personas acaparadoras se abastecen del fármaco y lo revenden, así como si fueran boletos para un partido de Los Naranjeros en el Estadio Sonora o para asistir a algún concierto.

Personas que para nada les importa el dolor por el que están pasando las familias de pacientes con Covid-19 y que aprovechándose de la situación lucran con esta necesidad, sin ponerse a pensar el sacrificio que hacen para poder desembolsar y comprar dicho medicamento.

Misma situación ocurre con otros medicamentos o incluso, se dice que también que se elevó la renta de tanques de oxígenos y, a como está el panorama, al no haber trabajo, para una familia común no es nada fácil desembolsar un promedio de seis mil pesos mensuales para rentar un tanque.

A lo que voy, es que no se vale que las personas se aprovechen de esta circunstancia y peor aún, que les importe un reverendo “cacahuate” y por la ambición de sacar unos cuantos pesos pongan en riesgo la salud de pacientes de Covid-19, quienes no pueden conseguir el medicamento ya sea porque no está a la venta o porque no les alcanza para comprarlo en la reventa.

En ese sentido, la Profeco debe estar más atenta de ese tipo de hechos y aplicar sanciones cuando se tenga que hacer, pues no es posible que se esté lucrando de esa manera con la salud de las personas.

El autor es reportero.

benjy_bar@hotmail.com