"Estoy desecho": expresidente Pepe Mujica habla de su tratamiento de cáncer
José Mujica, un emblema de la política de Izquierda a nivel Latinoamérica, habló con The New York Times sobre cómo pasa su vida desde que le fue diagnosticado cáncer de esófago.
El expresidente uruguayo José 'Pepe' Mujica, de 89 años, ha compartido recientemente detalles sobre su estado de salud tras ser diagnosticado con cáncer de esófago en mayo.
En una entrevista con The New York Times, Mujica reveló que aunque la radioterapia a la que fue sometido fue considerada exitosa por los médicos, él se siente "deshecho" y consciente de que está perdiendo la vida.
“Me hicieron un tratamiento con radiología. Según los médicos, anduvo bien, pero yo estoy deshecho”, comentó Mujica desde su modesta finca en las afueras de Montevideo, donde se encuentra recuperándose junto a su esposa, Lucía Topolansky.
Pese a los desafíos de su enfermedad, Mujica se mantiene firme en su visión de la vida, expresando su amor por ella y su tristeza por estar en el "tiempo de irse".
Mujica, quien gobernó Uruguay entre 2010 y 2015 y sigue siendo una figura influyente en la izquierda latinoamericana, aprovechó la entrevista para reflexionar sobre la condición humana, el consumismo y el sentido de la vida.
“La vida es hermosa. Con todas sus peripecias, amo la vida. Y la estoy perdiendo porque estoy en el tiempo de irme”, señaló con la franqueza que lo caracteriza.
El exmandatario, conocido por su estilo de vida austero y su crítica a la sociedad de consumo, destacó la importancia de vivir con menos y valorar el tiempo.
“La humanidad necesita trabajar menos y tener más tiempo libre y ser más sobria. ¿Para qué tanta basura? ¿Por qué hay que cambiar el auto? ¿Cambiar de heladera? Porque la vida es una y se va. Hay que darle sentido a la vida. Hay que luchar por la felicidad humana. No solo por la riqueza”.
Mujica también expresó su preocupación por el futuro de la humanidad en un mundo lleno de armas y fanatismo, y reafirmó su esperanza en que la vida humana se prolongue a pesar de los desafíos globales.
Al ser preguntado sobre cómo le gustaría ser recordado, Mujica, con su habitual humildad, respondió: “Como lo que soy: un viejo loco”.
Mujica, quien fue guerrillero y estuvo preso durante 13 años en la dictadura cívico-militar de Uruguay, sigue siendo un referente de la lucha por la justicia social y la sobriedad en un mundo cada vez más consumista.